Soy Jessica Hierro
Soy dietista-nutricionista, aunque la mayoría de personas e incluso los medios de comunicación a los “nutris” nos llaman dietistas o nutricionistas, a secas. En realidad, el profesional sanitario que ostenta el grado universitario de Nutrición Humana y Dietética, se llama dietista-nutricionista, con el guión en medio. También estoy graduada en el “Col·legi de Dietistes-Nutricionistes de Catalunya”, con número de colegiada “CAT 000707” (¡por el número quizá puedes intuir que soy de las dietistas-nutricionistas más veteranas de Cataluña! Todo un honor, la verdad).
Llevo más de 15 años asesorando a mis pacientes. Vaya, toda mi vida profesional. Y es que cuando acabé la carrera no me vi trabajando en empresas de alimentación o en un laboratorio. En seguida vi que lo que yo quería era asesorar a las personas y traspasarles mis conocimientos para que pudieran tener un presente y un futuro más saludable. Así que mi trabajo en consulta es muyyyy vocacional y disfruto viendo cada día todos los pequeños y los grandes avances de mis pacientes.
En mi consulta atiendo diariamente a personas que vienen por problemas de salud, arrastrando patologías y malas digestiones. En los últimos años también recibo a muchos y muchas pacientes que quieren revisar bien sus dietas vegetarianas. La ganancia de peso, en contra de lo que muchas personas piensan, también es un objetivo muy habitual. Pero si tuviera que destacar los dos grupos de pacientes que más he visitado, quizá serían los/las pacientes que buscan una pérdida de peso efectiva y duradera y también los pacientes que buscan resultados deportivos. Cursar un Posgrado en Nutrición y Obesidad, me ayudó muchísimo a empezar a tratar los casos de obesidad y sobrepeso. En el caso de los pacientes deportistas, para mí fue un gran aprendizaje poder participar como autora en el libro “La dieta inteligente para runners”.
Quizá te interese saber que también estoy Licenciada en Ciencia y Tecnología de los alimentos. Esta carrera estaba más enfocada a trabajar en la industria alimentaria y, aunque estos estudios no me motivaron tanto, reconozco que me han ido genial para conocer bien los miles de procesados o ultraprocesados que hay en las estanterías de los supermercados, y poder hacer las mejores recomendaciones de compra a mis pacientes.
Y qué más… ¡ah!, sí. Importante: más allá de mis títulos, considero que una de mis mejores armas es mi amor por la gastronomía. Sinceramente, no me imagino estar motivando a mis pacientes a disfrutar de su alimentación saludable sin poderles dar buenos recursos de recetas y técnicas de cocción. Vaya, si no me gustara cocinar y disfrutar comiendo, esto no sería lo mismo.
Me encanta cocinar y a mis fogones llevo mi tradición castellana (¡creo que aún no había dicho que soy de Burgos!) pero también mi amor por mi gastronomía de adopción, la mediterránea y concretamente la catalana. Y no te preocupes que, si te gusta explorar sabores nuevos, también te esperan recetas exóticas que te sorprenderán.
Y para que veas mi formación bien ordenadita, te hago una cronología de mis títulos:
- Diplomatura de Nutrición Humana y Dietética (2002-2005 – Universidad de Navarra)
- Licenciatura de Ciencia y Tecnología de los alimentos (2006-2008 – Universidad de Burgos)
- Posgrado Nutrición y Obesidad (2012 – Universidad de Navarra)
- Certificado Internacional en Cineantropometría Isak, Nivel 1 (2015)
- Curso de Especialización en Trastornos de la Conducta Alimentaria (2024 – Instituto de Postgrado ICNS)
Creo en
HÁBITOS PODEROSOS, NO EN DIETAS MILAGRO
Recientemente leí un libro que creo que se ha convertido en un superventas: “Hábitos atómicos” de James Clear. Quizá te suene. El libro me encantó. Entre otras cosas, destaca la importancia de hacer grandes cambios, cambios profundos y transformadores, después de un periodo de tiempo largo en el que se hayan ido sumando pequeños cambios.
¿Y sabes qué? Me di cuenta de que es exactamente lo que llevo años practicando con mis pacientes en consulta. Pequeños pasos que avanzan en la misma dirección. Es esa frase clásica de “sin pausa, pero sin prisa” que permite a mis pacientes un cambio de hábitos real que nada tiene que ver con esas dietas milagro que muchos habían seguido.
Porque, como dice James Clear en su libro “Puedes iniciar un hábito porque tienes la motivación para adquirirlo, pero la única razón por la cual lo mantienes y lo cultivas es porque se convierte en parte de tu identidad”
Los 5 errores
que mÁs escucho en consulta
El primer día que mis pacientes vienen a consulta hago un cuestionario extenso para conocer sus hábitos, qué suelen comer, cuáles son sus objetivos, qué dietas han probado, si tienen algún tipo de patología, etc. Es increíble, pero pacientes muy diferentes, cometían los mismos errores. ¿Y cuáles eran?
En mi consulta dejaremos de lado todos estos errores…
que les hacían pasar hambre, perder peso rápidamente (que luego recuperaban), sintiendo uno o dos días la euforia de “estoy perdiendo peso”, pero muchísimos más días el malhumor de ver que “no aguantan”, la ansiedad de “me comería cualquier cosa” e incluso tristeza y culpabilidad. No, esto no es una manera de conseguir ningún objetivo.
o bien confiar en que la pérdida de peso se producirá por tomar productos “quemagrasas” que en la mayoría de los casos tienen un escalo o nulo respaldo científico. Son personas que vienen a mi consulta cansadas de gastarse un dineral y ver que no logran sus objetivos.
en las redes sociales que no tienen formación académica que les capacite para hablar de nutrición o salud, pero están ahí dando consejos a cambio de una remuneración económica. A los que yo llamo “charlatanes”. Estos mensajes acaban ocasionando mucha confusión sobre lo que es bueno o malo, lo que se debe o no comer y los pacientes llegan agobiados, bombardeados de información, con miedos a la hora de comer y culpabilidad cuando no cumplen con lo que leen y escuchan en las redes.
lechuga, pollo y poco más, siempre cocinado a la plancha abandonando el placer por comer. Una conducta muy habitual en personas que vienen de haber probado mil dietas donde, en cada una de ellas, les han ido “prohibiendo” ciertos alimentos.
olvidando otros aspectos relevantes como el descanso o el estrés. “¿por qué no pierdo peso si como bien?”. Diariamente escucho comentarios así en la consulta y suelen ser personas que han recibido un asesoramiento nutricional basado en el peso, en la báscula, en contar calorías, quitar “alimentos que engordan”, compensar o restringir. Se han olvidado de escucharse y observar cómo se sienten, cuidar su estado de ánimo o el descanso.
Lo que nunca cuento
Siempre que viajo, me gusta visitar los mercados locales y probar los platos típicos de la zona. Me parece que se conoce un lugar y a sus gentes por su comida, y profundizar en la cultura y costumbres del lugar donde estoy, es la mejor manera de enriquecer mi viaje.
Cuando tuve que decidir con 18 años mi futuro profesional dudé entre estudiar Nutrición y Dietética o Veterinaria. Ha sido un gran acierto dedicarme a lo que hoy en día soy, dietista-nutricionista, porque me encanta y me siento afortunada de poder trabajar en algo que me apasiona.
De pequeña era muy mala comedora, muchas cosas no me gustaban. Gracias a la constancia y esfuerzo de mi madre, me fui acostumbrando a comer de todo. Y ahora pienso ¡cómo me pude resistir a lo que cocinaba mi madre con lo que rico que está todo! ¡Es mi referente en la cocina y en muchos otros aspectos de la vida!
A un solo paso
Estás a un solo paso de cambiar tu vida. ¡Anímate!
Reserva una sesión conmigo, online o presencial y veremos juntos cuál es la mejor manera de conseguir tus objetivos. Olvídate de dietas restrictivas, di hola a unos hábitos saludables
A solo un paso
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